Bueno, ayer comenzó el
Encuentro de Historietas, Juegos de Rol y Ciencia Ficción de la ciudad de Rosario conocido como
Leyendas, y algunos de los que concurrieron ya tuvieron contacto con el ejemplar
número cero de
Mondocomic en versión impresa...
Realmente este año la cosa se ve mejor organizada. El
Centro de Expresiones Contemporáneas, conocido como el
CEC, está arreglado para una mejor visualización de los stands, para que la gente camine o simplemente se quede charlando sobre bueyes perdidos (
bueyes jedis, mutantes, o manga) sin molestar a otros. Y por lo que se vió (o escuchó) el viernes la cuestión del sonido también está mejorada, ya que no se sentía demasiada presencia del sonido de las charlas y proyecciones en el hall central como en otros años. Aplausos a la organización hasta acá.
Y acá el lado oscuro... Las galerías de arte están dispuestas mejor que otros años, pero en estas ocho ediciones de
Leyendas jamás pude encontrar cuál es la coherencia del criterio para mostrar el arte. Me parece que priorizar el arte amateur sobre el profesional es algo que no tiene demasiado sentido. Un ejemplo basta para aclarar esto: No parece justo ni lógico que algunos de los primeros paneles con los que uno se encuentra sean de talleres de arte donde concurren adolescentes y niños que están en diferentes niveles de dibujo, y que el arte de un artista de primera línea como
Leandro Fernandez (que es uno de los dibujantes regulares de la serie
The Punisher de
Marvel desde hace más de tres años) esté casi oculto en un lugar imperceptible y oscuro. No digo que en ese lugar oscuro deban estar los talleres, pero debería pesar en la balanza a la hora de colgar arte en paneles la obra de un artista consagrado, para a que la gente amateur no se le escape la presencia de ella y pueda aprender viendo cómo es una página original de un comic que sale editado en el primer mundo. Ya se, me van a decir que nadie es profeta en su tierra...
Bueno, mañana más novedades sobre
Leyendas. Sigamos con otros temas comiqueros, amigos.
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