Bueno, por esta parte del globo terráqueo hay que agregar una más. La historieta argentina tendrá su adaptación en las pantallas grandes en las vacaciones de invierno, amigos, y se viene un clásico: Isidoro Cañones.
El rey de la noche porteña, el playboy mayor, el chanta máximo, Isidoro a esta altura por estas zonas es más que una historieta. Es un símbolo de una época argentina que hoy es pura nostalgia.
Isidoro nació dentro de Las aventuras de Patoruzú, y era sólo "el padrino", prototipo del hombre de la noche de los años 40, resabio y expresión decadente de aquellos niños bien que se iban a París a tirar manteca al techo. Estos vivían de alguna módica fortuna familiar y, a cambio de la ciudad luz, frecuentaban las boites de Mar del Plata. En 1968 sale a la calle Locuras de Isidoro, revista en la que hace su aparición Cachorra, la infartante rubia que se iba a convertir en cómplice de Isidoro (hoy le dirían "una amigovia") y mujer idealizada por millones de varones. En sus 40 años de historia la creación de Dante Quinterno llegó a vender 100 millones de revistas.
Ese chanta porteño que causó alegrías a más de una generación llega al cine el 12 de julio, en la tercera película de animación de la compañía Indiecito Studios. Con un costo aproximado de 6 millones de pesos, llevan adelante este proyecto un equipo de 120 personas entre dibujantes y operadores digitales que trabajan en 3D, realización de fondos, pintura digital, composición y posproducción. Las voces más reconocidas que se escucharán en esta película animada son las de Dady Brieva (Isidoro) y Luciana Salazar (Cachorra), y además en la banda de sonido se viene un renacimiento de todos esos viejos temas de Francis Smith que se escuchaban en los boliches de los años '70, como Zapatos rotos, Otra vez en la vía, Yo en mi casa y ella en el bar, De boliche en boliche, Quedate piola, Vicente, Estoy hecho un demonio, Vuelvo a naufragar y Súbete a mi barco.
Indiecito trabaja ahora en el desarrollo de su próxima película en 3D, Patoruzú, a estrenar en 2009.
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