sábado, mayo 23, 2009

Leyendo al viejo muchacho

Acabo de terminar de leer los ocho volúmenes que componen la saga de Old Boy, y debo confesar que me ha gustado muchísimo. Esto a mí me asombra de doble manera: primero, porque años atrás cuando fui al cine a ver la adaptación cinematográfica de este manga no me había gustado en lo absoluto (y bueno, les soy sincero, sobre gustos…); segundo, porque a esta altura de mi vida estoy leyendo mucho manga, cosa que años atrás me hubiera parecido un imposible (pero bueh, renovarse es vivir). 

Para los que no saben de lo que trata esta historia de Garon Tsuchiya, todo comienza con el protagonista (cuyo nombre se conocerá mucho más adelante) encerrado en una prisión privada. Él desconoce dónde está, e incluso tampoco sabe por qué está ahí. Lo único cierto es que hace diez años que lo metieron ahí adentro y él no hace otra cosa que ver tele y entrenarse físicamente esperando el día de su salida para vengarse de los que encerraron. Eso lo mantiene activo, con esperanzas y evita que se vuelva loco. Entonces, un día sin ninguna razón aparente lo sueltan. Desde ese momento, él intenta descubrir a la persona que lo privó de su libertad y saber la razón por la que tuvo que pasar todo ese sufrimiento, con una evidente sed de venganza.

El arte de Nobuaki Minegashi es realista, simple, con un muy buen manejo de sombras, de las expresiones de los personajes, transmitiendo un aura de pesimismo, de resentimiento, con algo de novela negra y ficción pulp. El protagonista siempre parece estar fuera de su entorno, como si no perteneciera a la realidad que lo rodea, con momentos de diálogos internos buscando su razón de ser, acumulando hipótesis sobre su pasado, y con flashbacks ocasionales que nos van revelando el misterio central de la historia. Un rompecabezas que atrapa al lector de manera brillante. 

De más está decir que ahora pienso darle una segunda vista a la película, que por lo que recuerdo no está desarrollado de igual forma que este manga. La versión que llegó a mis manos es la edición española, de ocho tomos de aproximadamente 210 páginas en blanco y negro, respetando el sentido de lectura japonés. Old boy es un muy buen drama psicológico adulto dentro de una novela de suspenso, totalmente recomendable. 

0 comentarios: