miércoles, septiembre 07, 2005

Panorama de un lector argentino promedio

Y ahora, algo bastante distinto a lo acostumbrado aquí en Mondocomic. Vamos a ver un pequeño panorama de lo que un lector argentino promedio puede tener a su alcance para satisfacer sus necesidades comiqueriles.

La realidad del lector de comics en este momento en esta parte de Sudamérica es bastante más optimista que hace años atrás. After Crisis (pero no la infinita, la del 2001 en Argentina) los lectores argentos de comics sufrieron un exterminio casi total de comiquerías y vieron como el material extranjero que compraban se les encarecía tres o cuatro (o más) veces sin que les aumentaran los ingresos mensuales. Para colmo, el material que venía en español costaba muchísimo más caro que el original en inglés (cuestiones entre el euro y el dólar). Así mucha gente fue quedándose sin su vicio. Pero entonces con el tiempo, y cuando empezó a haber una estabilidad aparente, comenzaron a aparecer los valientes que se decidieron a editar comics nuevamente en este país, una de las tantas actividades exterminadas en la década del 90.

Hace un año atrás veíamos que podíamos tener al alcance de nuestras manos (y de nuestros bolsillos) unas decentes versiones de algunos comics de Marvel editados en Argentina por Comics Conosur. Salieron las versiones Ultimate de Spider-man, de los X-men, los Ultimates, el Amazing Spider-man de Straczynski, el Spectacular de Ramos, el Punisher de Ennis, la mini Banner, algunas sagas de la serie regular de Wolverine, los X-Men de Morrison/Quitely, y el Uncanny X-Men contemporáneo. Algo era algo. Cuando esta editorial lanzó los prestiges de JLA/Avengers, de 1602, y el Origin de Wolverine, hubo una sonrisa enorme en más de un rostro.



Pero de golpe a principios de año parecía que volvía la noche... esta editorial perdió los derechos de Marvel ante la multinacional Panini. No duró mucho la oscuridad ya que a los meses Panini siguió editando estos comics en nuestras pampas, y ahora siguen estando en los kioscos Spider-man y X-Men en versiones Ultimate y Universo Marvel.

Paralelamente una editorial chica (Gárgola Ediciones) se embarcó a editar el Sin City: Una dura despedida en nuestro país, primero en versión prestige y luego en un tomo semejante al reeditado en USA pero con un tamaño un poco menor. Además lanzaron la adaptación de Star Wars Episodio III, la segunda historia de Sin City (A dame to kill for) en formato prestige, y una revista de antología llamada Bastion Comix (luego Bastion Unlimited) que incluye trabajos de autores nacionales además de historias nuevas y autoconclusivas de Sin City, y el Chosen de Mark Millar. En estos días Conosur y Gárgola se han unido para editar la versión argentina de la serie Star Wars Tales.




¿Y por el lado de DC qué pasa? Hasta principios de este año no pasaba nada... niente, zero. Hasta que la empresa Sticker Design se decidió a editar los comics de DC aquí en Argentina, y con una excelente decisión editorial, ya que fueron editados quincenalmente el Batman: Hush de Jim Lee, el Superman: Birthright de Waid y Yu, junto con la edición mensual de Superman/Batman y la impecable edición de Identity Crisis. Además fue una sorpresa para todos los comiqueros el encontrarse con el Green Lantern Renace completo en dos tomos a menos de dos meses de haber sido editado en USA.




Ahora ya finalizados el Hush y el Birthright, y luego de haber editado en formato prestige el Batman: Broken City de Azzarello y Risso, y el Batman: Mientras vuela el cuervo de Winick y Nguyen, están lanzando mensualmente por el lado del Caballero Nocturno la saga Tabula Rasa (que salió en Gotham Knights, es en donde Bane se revela como el hermano de Bruce Wayne), y por el lado de Superman se optó por editar los trabajos de Chuck Austen junto a Ivan Reis. Además comenzó a salir en formato prestige la saga Blitz de Flash (en donde se cuenta el comienzo de Hunter Zolomon como el Flash Reverso). Cabe destacar que hace aproximadamente 15 años atrás salía editada mensualmente la serie de Flash en Argentina, pero por un problema editorial (Flash era una revista de chimentos de la farándula) el personaje había sido rebautizado como Flush-man, una decisión espantosa. Ahora Flash vuelve a llamarse Flash como corresponde, pero supongo que los problemas editoriales siguen existiendo ya que en la tapa podemos leer bien grande BLITZ y vemos al corredor escarlata, pero su nombre aparece apenas mencionado... muy chiquito.



Obviamente esto no es todo en el mundo comiquero argentino, en un post posterior nos encargaremos de ver qué están haciendo los artistas nacionales... y la invasión Manga.

0 comentarios: