Le siguen vendiendo espejitos a los indios... o a los hijos de los inmigrantes?

Como sabran ustedes, se vienen las vacaciones de invierno y esto es para algunos productores del mundo del espectaculo una tentacion irresistible de tratar de llenar sus arcas con dinero proveniente de padres desesperados que quieren que sus hijos esten contenidos y entretenidos en alguna parte, antes que descontrolando el microclima casero. Entonces normalmente se producen algunas aberraciones debido al menosprecio al publico infantil (o adulto). Vamos a focalizarnos en el cine.

En estos dias que tanto se habla de la "invasion de las grandes superproducciones" que hacen que no haya salas para que la gente vaya a ver cine argentino, habria que ponerse a pensar varias cosas. Quien tiene la culpa de haber llegado a esta situacion: la gente que prefiere ir a ver esas superproducciones o los creadores de cine nacional que no saben como canalizar al publico para "nuestras" peliculas lleven tanta o mas gente a las salas? No es algo facil de dilucidar esto para mi, es un poco de ambas partes supongo. Creo que la taquilla aumenta cuando hay un buen entretenimiento (recuerdo el caso de Nueve reinas, un ejemplo perfecto de que si se quiere se puede hacer buen cine argentino de entretenimiento), y tambien creo que el publico argentino se come cualquier porqueria con buen marketing en haras de un patriotismo mal entendido (hace tiempo atras, la pelicula mas vista fue Un argentino en Nueva York, producto Teleferico que unio a Francella con Natalia Oreiro, o tambien recuerdo a Manuelita, un gran bodrio animado que incluso fue mandado como representante argentino a la Academia del Oscar con intenciones de figurar en alguna terna...)

Dentro de una semana se viene el "gran estreno nacional": Patoruzito. Esta pelicula tiene todas las de ganar apelando a ese patriotismo de entrecasa: un personaje indudablemente argento, clasico, mas conocido por los padres que tienen que llevar a los chicos al cine que por los mismos interesados en ir al cine; la musica esta compuesta por el team up de Los Nocheros y Le�n Gieco (y si faltaba mas, hay un tema de La Mosca en la pelicula); la voz en off del trailer de este film es la inconfundible ronquera de Mario Pergolini... Pero si han tenido acceso a ver el trailer de esta pelicula, notaran que algo huele mal, y no en Dinamarca.

Hay una notoria diferencia entre los fondos (hechos a todo culo en 3D por animacion computarizada, bastante dignos) con la animacion de los personajes que nada tienen que envidiarle a las animaciones del Mono Mario, por ejemplo, que parecen hechas a los pedos, ningun personaje mira directamente a otro, las bocas se mueven para un lado sin representar el movimiento de lo que estan diciendo, y las voces... Dios mio... No habia gente normal que pudiera haber hecho las voces de estos personajes? Encima todo esto se agrava si uno ve los avances de esta pelicula antes de la proyeccion de Shrek 2... La comparacion es mortal.

Todo esto surge con solo ver el trailer de la pelicula, ya se. Suena a prejuicioso. No hay que opinar sin haber visto el producto final, pero creo que el final de la historia es conocido: la pelicula va a ser un exito de taquilla (creo que puede hacer un buen papel frente a Spiderman 2 e incluso quizas pueda vencer en numeros a Garfield), va a reinstalar el Universo de personajes de Patoruzito en una nueva generacion de argentinos, y la pelicula en si va a ser apestosa. Y quizas Dante Quinterno llore desde el cielo al ver lo que han hecho con sus personajes. Pero como la taquilla va a estar bien, los productores van a estar chochos de contentos con este producto y no se van a preocupar por hacer algo mejor la proxima vez sino que se van a apurar para hacer algo rapido para el invierno que viene, digamos por ejemplo la resurreccion de Don Fulgencio o de Pelopincho y Cachirula, hecha obviamente a los pedos y con el mero fin de facturar.

No aprendemos mas.

PD: Lo mas significativo de todo esto, es que tambien dan los avances de la pelicula de Erreway, y realmente esta ultima parece estar hecha con respeto al espectador.