Mondo-lecciones de defensa en un balneario

Bueno, por esta parte del globo terráqueo estamos sumergidos en pleno verano, y muchos de nosotros tratamos de ir a pasar nuestras vacaciones en algunos interesantes lugares de veraneo para calmar estas altas temperaturas a las que estamos sometidos. Por lo tanto, ir al mar a refrescarse es una de las principales metas veraniegas. Pero en estos tiempos que nos toca vivir, leemos una y otra vez noticias sobre robos e inseguridad en los balnearios. Que a fulano le robaron la cámara fotográfica, que a mengano le quitaron el dinero luego de golpearlo, etc...

Mondocomic, fiel a sus preceptos de ser útil a la comunidad, les va a dar una pequeña ayuda a todos los viajantes que se dirijan a disfrutar sus vacaciones en alguna playa. Y obviamente, la ayuda viene del lado comiquero, amigos, porque no hay nada más real en la vida que lo que pasa dentro de una historieta, ¿no es cierto?

Para ayudarnos, les presento al manual básico de autodefensa: Master of Kung-Fu #20 (1974), de Gerry Conway y Paul Gulacy

No hay nadie como Shang-Chi para ayudarnos a sobrevivir en una playa peligrosa. Por si no lo sabés, Shang-Chi es el Maestro Supremo del kung fu, y además es el hijo de Fu Manchu, la mente maestra china que más de una vez quiso conquistar el mundo. Shang-Chi se reveló contra su padre y se volvió un aliado del archienemigo de Fu Manchu, Sir Denis Nayland Smith.

Bien, supongamos que estamos en esta situación: Estamos caminando así muy relajados por la orilla del mar, mojándonos los pies y pensando en nada... ¡y en ese instante una patota submarina sale dispuesta a atacarnos y robarnos la ropa!

Entonces... ¿qué nos aconseja Shang- Chi? ¡Sorprender al adversario! ¡No hay mayor sorpresa para un atacante que encontrarse un pie donde tendría que haber una mano!

Eso si, siempre cada golpe repartido tiene que estar acompañado de un grito tipo HAI-YA!, WU-HA!, HIJUELAGRANPÚ! para causar temor dentro de las oscuras almas de los maleantes. Y sobre todo hay que usar la maldad que habita en sus oscuros corazones en contra de ellos mismos, como por ejemplo en este caso:

Suponete que se te viene encima uno con un flor de cuchillo. Entonces vos tenés que esquivarlos cual gacela nipona y hacer que el brazo se le doble en 270º para que él mismo se clave su filo en el pechito. Y vos no hiciste nada, todo se lo hizo solo (eso es bueno para explicarle a la policía luego, decirle que te atacó una patota kamikaze).Otra técnica milenaria clave para defenderte del vil ataque de los malhechores es el "Toco el aire y no te toco". Supongamos que se te planta un desacatado adelante tuyo y empieza a mover su navaja como si fuera un abanico de los Loco Mia. ¿Qué hacés al respecto?...


¡Claro! Cuando el tipo te tira una estocada, vos te corrés para adelante y terminás dejando al tipo del otro lado. El tipo estará de lo más confundido, sin poder entender cómo hiciste para pasar tus piernas detrás de las de él (y lo más probable es que vos tampoco entiendas cómo lo hiciste). Eso sí, siempre mantené el puño cerrado y mostráselo como diciendo "¡mirá este puño que es tan grande como tu cabeza!"

Si todavía queda alguno con ganas de atacarte... es hora de aprender la Toma Final, la Fatality que necesitás para acabar la lucha. Cuando el tipo viene corriendo hacia vos con toda la furia, lo primero que tenés que hacer es arrodillarte como pidiéndole la mano, y hacer esto:

Piña al estómago, patada en el amigo, y listo. Thwack y crack, o sea. No cabe ninguna duda que después de esto que el tipo de lo único que va a tener ganas es de cantar el último tema de Mika.

Espero que esto les haya sido de ayuda en sus plácidas vacaciones, amigos. Quizás más adelante habrán más lecciones de vida en este humilde bloguete.